Carmen Caballero Sevilla
Originaria de Celaya Guanajuato,
Hija de un teniente coronel de la revolución, quien murió cuando ella tenía 5
años. Ayudaba a su madre a vender fruta, hasta que a los 18 años Gregorio Piedra
santa la inicio en la cartonería, una de las expresiones artísticas de esa
región. su primer judas fue echo de molde, y posteriormente se especializo en
las máscaras, judas y diferentes juguetes, con el maestro Piedra santa se
quedaría cerca de un año para perfeccionar sus habilidades. Su vida fue un total misterio,
al igual que su obra.
El
primer encuentro que tendría con el artista Diego Rivera fue también una
experiencia que refleja mucho la condición de la mujer humilde de aquella época
o tal vez como parte de nuestra sociedad aun en la actualidad. En un mercado
llamado Abelardo Rodríguez, imponentes judas de cerca de 4 metros cautivaron la
mirada de Rivera, inmediatamente se acercó a saber quién estaba detrás de tales
obras.
Un tal Santos miranda "el
hombre" fue el primero en aparecer, pero casi de inmediato discutiría con
una mujer ya de edad, este hombre golpeaba a la mujer y le quitaba su dinero,
ella contaría que por los golpes y el maltrato no tenía dientes, de sus 20
hijos nacidos, solo 4 sobrevivieron. Ella vivía cerca de la carretera
puebla.
La casa, cueva, jacal que era a la vez, su taller, cocina, su pequeño mundo rodeado de limitaciones y miseria. Gran parte de su obra no se conoció, ya que en épocas en donde el arte tradicional era considerado de bajo valor, la vida del artesano promedio era dura, que decir si el artesano en cuestión era una mujer.
Carmen
caballero es una de esas artistas que su vida y obra reflejan el talento oculto
que había por algún extraño rumbo, por esa extraña época en la que lo surreal
era parte cotidiana de la vida. Por asares del destino, seria Diego Rivera
quien descubriría a esta enorme artista. No podría describir el sentimiento de
asombro que produjo en Diego la obra de una pequeña gran mujer, que, a pesar de
su edad y condición, lograba dominar las técnicas de la cartonería y darles un
toque que hasta hoy resulta imposible de ver en otro lado.
El primer encuentro con Rivera sería muy fructífero ya que este le
compraría un judas de cerca de 2.5 metros y media docena de "muertecitas"
y un encargo de más claveras, también le ofrecería trabajo como su "judera
personal" Lo cual ella aceptaría. Se instalaría para trabajar por
temporadas en la casa de Frida Kahlo y Diego Rivera.
Los
encargos más comunes que Frida le pedía eran juguetes y catrinas que ella misma
vestía, por su parte, Diego le pedía en ocasiones encargos particulares, pero
por lo regular siempre tuvo libertad creativa. Sus piezas fueron motivo de gran
inspiración para Diego Rivera que el mismo compararía la obra de Carmen
Caballero con obras de grandes maestros como Van Gogh, Francisco de Goya,
Tintoretto, El Bosco, Picasso entre otros.
Fue su sencillez y su gran talento lo que la destaca de otros artistas, su arte totalmente único, muestra esa belleza y esas formas que parecen sacadas de otras dimensiones, capaces de trasmitir una esencia única, cargadas de un misticismo que solo puede ser obra de un artista de altísimo nivel.
Diego
Rivera retrataría parte de los judas en sus obras, su estudio estaba adornado
con varias "muertecitas" eso sin duda, refleja el cariño y gran admiración
que Rivera sentía por el trabajo de Carmen Caballero, también el escultor Henry
more, al ver los enormes judas realizo una serie de bocetos los cuales fueron
exhibidos en el museo experimental el eco.
Carmen caballero dejo un legado entre los pocos artistas cartoneros de la antigüedad, todavía se pueden apreciar sus obras y ver en ellas la manera en que la artista moldeaba su realidad, una realidad llena de color y magia que hoy en día sigue cautivando la imaginación.
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